En la taberna, el gallo lanzo su agudo canto. Los que al umbral esperan exclaman impacientes: "Abrid, que es breve el tiempo que nos queda, y el viaje que aún hemos de emprender , jamás tiene retorno". Omar Kheyyam |
copa tras copa en genero acto
de homenaje, y el gesto transparente
cumple la promesa: hay un mundo intacto.
Copa tras copa, el corazón honesto,
pletórico de gracias por lo dado
con ojos nuevos volverá sagrado
la copa, mano, recipiente y gesto.
En copa, en mano, en recipiente, en rito,
el alma se sumerge en la inocencia
de un origen final glorioso y recto,
pues siendo más que un néctar exquisito
sabemos que columbras en tu esencia
la nobleza de un símbolo perfecto.