sábado, 12 de noviembre de 2011

Secretos del Fénix de Saturnino Valladares. Maribel Cerezuela

esta fotografía de Fabiana es la más bonita que he encontrado en mi repertorio para ilustrar lo que quiero expresar.
      Si una persona se puede enamorar de la poesía, palabra escrita, yo me he enamorado de Secretos del Fénix sin ningún impedimento.

 
    Son 101 páginas de placer que van desde la pág. 30, por poner un ejemplo, donde una palabra, ella sola, llama la atención y te sumerge en mil placeres de mujer, a la página 47 que puede que sea el texto más amplio con "una mujer camina"...

       A su autor, le escribí:  "Y aquí estoy, con un libro en la mano que se me ha hecho muy cortito. - cuando por fin he podido terminarlo me ha sabido a poco. ...

Y quería decirte que me ha gustado muchísimo. Pero estoy de lo más opaca. No se razonarte el porqué.

Leyéndote me he acordado de todos los buenos haiku que he leído en mi vida.

Me has recordado a Pablo Neruda, Kavafis, Alexandre, incluso un olor a
la maga del gran Cortázar que me ha sido muy agradable"


     Y sigo muy obtusa. Ángel, Miguel, tenéis que leerlo. Disfrutaréis. Ángel, ayer fui al Tayko, me lo llevé para dejártelo pero no apareció por allí más que Lirola y Campoy.

     Se lee, se disfruta. Hacía mucho tiempo que no sentía esa complicidad con la poesía. Enamora. En serio.